lunes, 1 de octubre de 2012

Slash, slash everywhere.

Antes de que yo me pasara a los fandom donde las relaciones no se denominaban "yaoi" sino "slash", yo creía (casi que puedo decir obviamente) que las únicas personas metidas en esto eramos quienes lo veíamos y lo escribíamos.
Tampoco veía diferencia entre el yaoi y el slash, para mí eran cosas homo, me gustaban y punto.

La cuestión es que, ahora que mi actividad fanfickera se desarrolla más en el slash que en la animación me he dado cuenta de que no, no somos los que lo desarrollamos y lo consumimos los únicos que sabemos de él.
No sé si ha ido incrementando en los últimos tiempos, con eso de que la homosexualidad se puso de moda (estupideces, puras estupideces. Estúpidos aquellos que piensan que pueden ser homosexuales sólo por moda) o si siempre fue así, porque obviamente yo no estuve siempre, pero creo que hoy día todos podemos verlo incluso con normalidad.

Ahora con todo lo cliché puedo decir que "ya no es como antes" (excepción: mi familia homofóbica).
¿Cuál era el revuelo cuando salió al cine "Secreto en la montaña"? Vamos, la polémica estaba por los cielos, o por lo menos así se percibió de este lado de mi mundo.
Hoy día, House huye con Wilson después de fingir su muerte y nadie dice absolutamente nada porque todos ya sabían que era eso lo que debía suceder. Algo que yo, personalmente, no me imaginaba ni de cerca cuando la serie comenzó (pero que fue jodida y malditamente ÉPICO).

No es sólo que los programas, películas y series estén tomando un tinte homosexual descaradamente evidente (feel like Supernatural, Harry Potter, Avengers, etc, etc), al grado de que Marvel decidió sacar del closet a Linterna Verde, porque eso sería simplemente decir que "el mundo se está amariconando" como escuché alguna vez. No, se trata de haberse dado cuenta de que ahora todo el mundo parece saber que la definición "slash" está más allá del nombre de uno de los guitarristas más famosos del mundo y en toda la historia de la música.

Grupos musicales, autores, actores, escritores, guionistas, productores, periodistas... parece ser que ahora todo el mundo está enterado de ello y se lo toman con comedia. No es por ser paranoica, pero realmente parece como si creyeran que se pueden burlar de nosotros y el slash.
No es por nada, pero el slash es cosa seria, y no lo es tanto al mismo tiempo. Lo cierto es que es un pasatiempo, pero todo ser relacionado bien a bien con el slash, sabrá a qué me refiero cuando digo "importante", pese a que no deja de ser "tan sólo" un pasatiempo. Para algunos es toda una vida.
Y, bien por nosotros, que todo sea slasheable está perfecto pero, seriamente, hay algunos que se toman estas realidades inventadas (al parecer para vender) muy en serio.
La homosexualidad no es una broma. Más aún: el amor no es una broma.

El slash no son sólo dos sujetos que se buscan para tener sexo porque "oh sí, la homosexualidad es lo de hoy", no. Puede que sí, nos gusten las escenas eróticas (o pornográficas, para algunos. Yo no lo veo así), pero muchas de las parejas slash, antes que cualquier otra cosa, son dos hombres que se atraen. Una atracción (física, intelectual, olfativa, instintiva...) que en la gran cantidad de casos se convierte en un amor de verdad.

No sé si los medios realmente estén pretendiendo jugar con esto (que no me parece del todo gracioso aunque seguido, muy seguido, me saque muchas risas), si ahora el mundo ha hecho una revolución gay, si sólo quieren manipular nuestras mentes; si se deba, acaso, a que la humanidad va en declive hacia su inminente fin por degeneración (aquí un ¿Eh? por parte de algunos); yo sólo sé que antes era anormal escribir sobre slash en las revistas, blogs públicos que no pertenecían a fujoshis, fuera de los fanfics/fanarts y mucho menos en los periódicos.
Hoy día, todo el mundo sabe lo que es el slash y se está tan cerca de él que te lo puedes encontrar en cada vuelta de la esquina.

No sé, mundo, qué te ha pasado; mientras tanto, yo seguiré haciendo ficción. Y como van las cosas, un par de trabajos que ya no son tan ficticios.

Publicidad: Visite usted mi nuevo blog de fanfiction (ese que hice porque ya no hallaba dónde meter mis trabajos sin que corrieran peligro de desaparecer), aún me falta subir bastantes de los largos, pero ahí la llevo: Le blog de fiction.