martes, 19 de julio de 2011

La persona más importante.

Soy de la clase de persona que se intenta jamás tener favoritismo, porque estos son algo que definitivamente detesto desde lo profundo de mi alma. Son algo que me han hecho miserable durante largo tramo de mi vida, y que siempre estarán ahí, dispuestos a seguir jodiendome.
No, no me gustan los favoritismos, pero creo que todos, o al menos aquel porcentaje que somos afortunados de poder sentir aquello que gustamos de llamar "amor", tenemos alguien que siempre es mucho, por una trecho kilométrico, más importante que las demás personas a las que queremos.

Yo siento. Me gusta amar, querer, y tener sentimientos gratos por las personas que, cruzándose en mi vida por razones superiores a mí, han logrado ganarse un espacio en mi corazón. Me es difícil querer, porque soy ingenua y fácil de engañar; las personas inadecuadas abusan de ello y me han herido dentro de mi estupidez un millón de veces. Es por eso que valoro sobremanera a aquellos que, de forma sincera, llegan a mí.
Amo a mis amigos, con toda mi alma; siento como una vorágine de emociones me embarga cuando estoy con ellos, y, pase lo que pase, son capaces de sacarme una sonrisa aun en los momentos más complejos y vulnerables. Mis verdaderos amigos, aquellos que me costó todo lo que tengo de vida encontrar hasta que se dignaron a ponérmelos de frente, aquellos a los que les costó acoplarse a mí, y a los que a mí misma me costó acoplarme, las personas a las que les he abierto el corazón y no me han traicionado, que me han aguantado, que han sabido guardarme secretos, respetarme, y tratarme. Ellos son importantes para mi, mucho más que otras personas.
Mi familia, a la que amo pese a que puedo ver todos sus errores que no son capaces de corregir y me mantengo al margen. Pese a que me han hecho un sin fin de cosas que, sin saber me han herido de manera profunda. Los amo sin necesitar una razón.

Pero hay alguien en mi vida, al que le tengo un cariño que va más allá del entendimiento humano.
En algún momento de mi existencia me di la horrible cuenta de que no sería feliz si no pasaba cada segundo a su lado. Que necesitaba tenerle conmigo por sobre cualquier cosa, que no quería dejarle solo porque quizá podría necesitarme, para cualquier nimiedad yo quería estar a su lado, así no fuera algo más que el simple hecho de hacerme un gesto, o dirigirme una palabra sin sentido; cada segundo vale la pena si estoy a su lado.
Es por eso que hay ocasiones en que los demás no entienden que simplemente no puedo estar en el punto máximo de mi éxtasis. Porque hay ocasiones en que yo esperaba que esta persona estuviese a mi lado, en ese momento que yo consideraba importante y por sobre cualquier cosa o persona quería disfrutar con él.

Sonará cruel para las personas a las que quiero de verdad, pero es tan simple como el hecho de que no es lo mismo pasar el tiempo o el momento especial con alguien a quien quiero, que con la persona más importante de mi vida.
Porque sí, me divertí con ustedes en ese momento, y anhelo con el alma cualquier pequeño instante que podamos pasar juntos pero, sin duda ni remordimiento, cambiaría todo eso por un instante al lado de mi persona más importante.
Porque si no me vieron plenamente feliz en aquel momento que pensaron que debería estarlo sin duda, fue porque él no estaba ahí como yo quería. Y sé que fue mi culpa, porque tengo que aprender a elegir cada segundo: él o ellos. No puedo tenerlo todo.
Tristemente tengo que decir que, para poder llamarlo felicidad, mi decisión no podría ser ellos...
No es nada personal, es sólo que el amor es complejo, y no se puede amar por igual de forma homogénea.

1 comentario:

  1. Me has hecho recordar a alguien con todo eso...
    sobre lo que dices sobre los favoritismos, creo que los menos afortunados solo por no tener una cara bonita siempre nos vimos afectados por eso XDU en mi caso. En caso de alguien más, creo que los favoritismos simplemente hieren cuando son dados a conocer, pero de una manera hiriente, si yo prefiero a alguien o algo, si los demás no lo saben no hay problema jaja
    En fin... nah ¿sabes? creo que siempre habrá una persona más importante, así como un mejor amigo, un buen hermano o hermana, un buen padre, un buen conocido, un amante. A veces esos títulos puedes juntarse más de uno en una sola persona, a veces no, son especiales para cada quien, lo que quiero decir es; que importa si una persona puede considerarse la más importante, después de todo y como dices, cada quien con su cada cual. Podemos tener cinco amigos, pero solo con uno vamos a poder hablar de cierto tema, o cotillear sobre algo, cada persona tiene sus propias cualidades y es por eso que cada una te hará sentir diferente. En mi caso tuve un montón de amigos, pero cada uno merecía su propio "título", el más "normal", la más "linda", la que más me cae mal XD, una de ellas se ganó mi corazón y se convirtió en la persona más importante, que hasta hoy sigue siéndolo.
    Supongo que así siempre será, no podemos sentir lo mismo por todos, porque simplemente no son la misma persona.
    PD: gracias por pasarte por mi cuento la otra vez, ^^ debo decir, ehem que tengo preferencia por ese tipo d finales, ya que siento una gran admiración (obsesión) por el opiomano más arabesco; Edgar Allan Poe.

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